jueves, 18 de marzo de 2010

Pueblas: Sucesos de julio.

¡Algo anormal pasa en la Casa del Pueblo el día 18 de julio! Concurrencia extraordinaria, comentarios en alta voz, grupos que entran, obreros que salen, movimiento en fin sospechoso y desusado ¿Qué pasa?

Se han enterado del levantamiento en África, saben que algo sucede en Sevilla, y discurren acerca de lo que estará sucediendo en el resto de España, y acerca de las medidas que ellos habrían de adoptar ante tal situación.

La población de orden, en su mayoría, se ha recluido en sus casas, y la Guardia Civil está acuartelada esperando órdenes de sus jefes. Sin embargo... los rojos, o no se atreven, o no quieren manifestarse de modo violento en los primeros momentos.

Los días 18 y 19 transcurren pacíficamente, siendo la única nota reveladora de la anormalidad, el mayor número de obreros en la calle, que contrasta con el mayor retraimiento de las otras clases sociales.

El día 20 empieza la recogida de armas con el intento de apoderarse de las que la Guardia Civil tenía bajo su custodia, cumpliendo así las órdenes del Gobernador de la provincia, como lo aseguraba el Alcalde en su entrevista con el Comandante de aquella fuerza:

-Acabo de recibir por teléfono orden del Goberandor, para que Vdes. me entreguen las armas que tienen en depósito.

-Yo no puedo recibir órdenes que no emanen de mis jefes. Consultaré con la Comandancia, y en consecuencia con lo que de allí me digan, así procederé.

De la Comandancia no contestan, y el Alcalde tiene que marcharse con la negativa por respuesta.

A poco, pasa éste un oficio al cuartel de la Guardia Civil reclamando el auxilio de una pareja para efectuar en el pueblo la recogida de armas, y cuando ésta se estaba verificando, se detiene frente a la Casa Cuartel un coche en que viajaban un teniente retirado, un Guardia Civil y dos paisanos. Desciende del coche el Guardia, y entra al Cuartel desencajado, pálido y como asustado, diciendo a modo de saludo al Comandante de aquel Puesto:

-Vengo en manos de comunistas. Es necesario que Vdes. se preparen, pues tienen que salir inmediatamente para Santiago. Yo sigo a Riveira a buscar a los que están allí de guarnición, y al regreso les recogeremos.

-Yo tengo un conflicto con estas armas, dice el Brigada mostrándole las ya recogidas y las que había en depósito en el cuartel.

-Déjelas Vd. y prepárense para salir, porque la cosa urge.

Efectivamente, poco después, la Guardia Civil abandonaba el pueblo, y marchaba camino de Santiago, simulando con la de Riveira, Boiro y otros puestos, estar al lado de los revoltosos, si levantar el puño cuando las circunstancias no permitían otra cosa, era hacer profesión de fe revolucionaria.

A partir del día 20 en que la Guardia Civil marchó a Santiago, no hay en las Pueblas más autoridad que la del Frente Popular, que, dicho sea en honor de la verdad, en todo tiempo se ha manifestado más comedida y prudente, de lo que las circunstancias permitían esperar.

Toda su actuación, hasta el día 28 en que aparecieron las fuerzas del Ejército, hubiera quedado reducida a incautarse de las comunicaciones y establecer servicios y turnos de guardia y vigilancia en caminos, muelle y población, a no haber sido provocado el día 21, por la animosidad de unos o la imprudencia de otros, el asalto a la casa de los Sres. Ferrer, en el que los revoltosos emplearon todos sus elementos de combate, llevando con esto la intranquilidad a muchos hogares que quedaron desiertos, huyendo sus moradores a lugares que creyeron más seguros.

**********

Texto procedente de la obra del canónigo de la Catedral de Santiago de Compostela, Revdo. P. D. Manuel Silva Ferreiro, Galicia y el Movimiento Nacional: paginas históricas, 1938.

No hay comentarios: